La alimentación tiene gran influencia en cómo se mantiene y funciona nuestro cuerpo y con ello, en una apariencia jovial o avejentada.
Así como hay alimentos fuentes de colágeno y antioxidantes que ayudan a que nuestra piel luzca más firme e hidratada, existen otros que nos pondrán unos años encima.
Refresco
Provoca que las células envejezcan rápido. Las altas concentraciones de cafeína pueden afectar a la calidad del sueño, algo que se “asocia con un aumento de los signos de envejecimiento , una función disminuida de la barrera cutánea y una menor satisfacción con la apariencia”, de acuerdo a un estudio del Cleveland Medical Center, en EE.UU.
Sal
La sal reduce la producción natural de colágeno del organismo. El exceso de sodio en la dieta puede provocar presión arterial alta, enfermedades cardíacas y derrames cerebrales. También puede causar pérdidas de calcio, algunas de las cuales pueden extraerse del hueso.
Alimentos fritos
Deshidratan y almacenan grasa en la piel. Las grasas trans se encuentran en muchos alimentos fritos, “rápidos”. Además de provocar aumento de peso, pueden incrementar sus probabilidades de presentar una enfermedad cardíaca o un accidente cerebrovascular.
Carne procesada
La carne procesada se refiere a la carne que ha sido transformada a través de la salazón, el curado, la fermentación, el ahumado, u otros procesos para mejorar su sabor o su conservación.
Contienen aditivos relacionados con la inflamación y que también pueden dañar el colágeno de la piel (lo que acentúa arrugas y marcas de expresión). La carne procesada está clasificada como carcinógena para los humanos.
La mantequilla o la margarina
Son ricas en grasas saturadas. Incluso las que se venden como bajas en este tipo de grasas. Las grasas hidrogenadas (como las que contienen la margarina y la mantequilla) se correlacionan positivamente con el grosor de la piel y las arrugas.